¡Qué suene la copla!: Erika Leiva
el 21 octubre, 2012 en Cádiz, Copla, Crónicas, Jerez de la Frontera, Música
La que fuera una de las promesas surgidas del programa televisivo Se llama copla se ha convertido en una deslumbrante realidad. Erika Leiva puso en pie con cada clásico a un público totalmente entregado a su voz y temperamento en el estreno de su nuevo espectáculoRecordando las estrellas de la copla, en el Teatro Villamarta.
Texto y foto: Ángela Uceta
Se presagiaba una gran noche, una gran voz, un gran homenaje a las grandes y a los grandes de la copla. Y así fue. Erika Leiva salió al ruedo del Villamarta, tablas del arte flamenco, con una gran responsabilidad ante un público exigente, seguidor y conocedor de su trayectoria profesional y de la de los homenajeados. Fue anocheciendo en el teatro para centrar toda la atención en el destello de luz que se dirige al escenario, y en ese mismo instante la copla sonó en forma de poesía a través de la voz de un narrador: ¡qué suene la copla! ¡qué suene la copla!. Esa poesía describía a la primera de las grandes, Concha Piquer. La magia se había creado, ahora había que mantenerla. La artista gaditana aparece con garra, desenvolviéndose con mucho arte, cómoda y decidida con un traje blanco de noche que acaparaba todas las miradas. A partir de ese momento, la entrega y el flechazo del patio de butacas con el escenario crearon una atmósfera cautivadora entre “Suspiros de España” o “Y sin embargo te quiero”.
Llegó de nuevo la copla en verso, la presencia del narrador ponía en alerta al respetable expectante que intentaba adivinar de quién se trataba, la sevillana Juanita Reina. Erika deslumbró a todos con “En el último minuto”. El espectáculo sigue, es dinámico y hay cambios. Sobre el escenario y con un vestido rojo de Miguel Reyes, la coplera entona “Paloma brava” evocando en nuestra mente a la más grande, Rocío Jurado. Pero no todo son canciones conocidas, sino que también hay lugar para temas como “La mujer del torero” que refleja gran parte de la vida de la chipionera.
“(…) Mi amante amigo tú que me ayudas cada día a levantarme (…)”, las grandes letras ayudan a aumentar la emoción del momento y llegan importantes dedicatorias. Con esta composición Erika no duda en hacer mención a Juan Pedro Hernández y Mabel Jiménez, grandes amigos de la cantante. Pero sabemos que la copla no es solo terreno de mujeres, sino que también existen los grandes del género. En el popurrí de plata fina sentimos a Antonio Molina, Farina, Manolo Caracol, entre otros, en la voz de Erika.
Y aunque los momentos emotivos se suceden, la cantante expresa sus vivencias con cada homenaje como con la mejor vendedora de la canción española, su madrina artística y gran amiga, Marifé de Triana. El poderío unido a la voz y paseíllo con bata de cola hicieron que el jurado en las butacas se rindiera y sentenciara: “¡De categoría!, ¡qué arte niña!” Cómo no podía ser de otra manera, el tributo a Jerez se transformó en sentimiento puro. Una puesta en escena en la que no faltaba detalle: vino Fino, mantón y Pedro Ximénez bajo “(…) palabras de desengaño que vuelven a su memoria al cabo de tantos años (…)”.
“Empecé cantando por ella, me enganchó su temperamento, como ella no hay dos, como ninguna no hay dos”, afirmó para dar paso al gran reto, a un momento cumbre y crucial; el espíritu de La Faraona entró en escena. El público consciente de la gran responsabilidad del momento no duda en expresar y manifestar la autenticidad de Erika: “¡Y ninguna cómo tú! “, “(…) A tu vera, a la verita tuya (…)”, “(…) Estoy loquita por tu querer Antonio Torres, te quiero (…)”, son algunas de las letras conocidas que suscitaban las palmas por bulerías. Y aunque se notaba que el espectáculo estaba llegando a su fin, la fuerza de los sentimientos seguían a flor de piel. Erika Leiva está llamada a ser una gran diva y finalizó en “La encrucijada”. ¡Qué suene la copla!, ¡qué suene la copla!
Teatro Villamarta, Jerez de la Frontera. Viernes 19 de octubre 2012. Aforo: Semilleno.Erika Leiva. Recordando las estrellas de la copla.Dirección musical: Daniel Matas.
Vestuario: Miguel Reyes.
Vestuario: Miguel Reyes.
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